MENTALES
*** 1 La mente de Thuya está muy frecuentemente ocupada con pensamientos o
ideas fijas, obsesivas y, a menudo, francamente alucinatorias. Cree que su
cuerpo está hecho de vidrio o de cristal, que es frágil y quebradizo. Cree
tener animales o algo vivo que se mueve en su vientre (sobre todo en la fosa
ilíaca derecha) y, a veces, hasta piensa que oye voces o llanto en su vientre,
o cree que está embarazada (embarazo nervioso o falso). Cree que está bajo un
poder superhumano. Cree que su alma y su cuerpo están separados, que su cuerpo
es delicado y más liviano que el aire, que es delgado o, por el contrario,
pesado; que él es doble, que está dividido en dos partes, y no sabe cual es de
él al despertar. Vé fantasmas de noche, al cerrar los ojos. Vé Personas. Cree
que es un criminal o que está por morir; que la siguen, que alguien camina
detrás.
** 2 Tiene miedo a los extraños; está peor por la presencia de ellos, y les
tiene aversión; evita ver gente, tiene aversión a la compañía y a todo; tiene
miedo a que se le acerquen (sobre todo en el delirio) y lo toquen, porque cree
que es frágil. Cree ver extraños, o que los hay en la habitación; o ve gente a
su lado y conversa con ella; las cosas familiares le parecen extrañas. Miedo a
la locura, a las enfermedades. El miedo parece salirle del estómago.
** 3 Siempre está apurado: en sus movimientos, en sus ocupaciones, al
caminar, al hablar, en su actividad mental. Siente que el tiempo pasa muy
rápido.
** 4 Su esfera intelectual padece algunas modificaciones que se maniafiestan
por equivocaciones al escribir (omite letras, sílabas o palabras) y al hablar
(coloca mal las palabras ), o usa palabras equivocadas. Olvidadizo, sobre todo
a la mañana al despertar. Le cuesta concentrarse; está confuso, peor de
mañana; al hablar; tiene errores sobre su propia identidad y se pierde en calles que le son bien conocidas. La memoria es escasa, para expresarse, para
el trabajo mental, para las palabras; no recuerda lo que acaba de hacer o lo
que va a decir, o a las personas. Aversión al trabajo mental. Estupor de
mañana después de levantarse; no sabe donde está. Imbecibilidad después de la
vacunación. Cretinismo.
** 5 Tiene ansiedad de conciencia, se siente culpable; se reprocha, cree
haber hecho mal; llega a creer que es un criminal. Gran ansiedad por la
salvación de su alma; desesperación religiosa por su salvación. Está triste,
llorosa e inquieta, especialmente durante la menstruación; triste cuando suda
o cuando camina. Descontento. Llora cuando le hablan, peor por el consuelo.
Ansiedad por el futuro. Depresión en el puerperio.
** 6 Todas sus manifestaciones mentales están peor a la mañana al despertar;
confusión, dificultad en la comprensión, memoria, tristeza, hipersensibilidad,
inquietud, irritabilidad estupefacción, taciturnidad.
GENERALES
*** 13 Para Hahnemann, Thuya era el medicamento que antidota las
manifestaciones mórbidas del miasma crónico que él denominó Sycosis, lo que
fue confirmado posteriormente en la clínica durante más de un siglo,
corroborando el aserto hahnenianniano a través de miles y miles de pacientes
que se beneficiaron de su aplicación, convirtiéndolo así en el antisycótico
por excelencia, guardando la misma relación entre medicamento y enfermedad que
la que tiene Mercurios con la sífilis y Sulphur con la psora. Casi afirmaría
que el remedio surgió en la historias de la humanidad más o menos
simultáneamente con las fuentes que engendraron la sycosis, que fueron la
blenorragia mal tratada o suprimida, que alcanzó así los planos más profundos
del individuo, y la vacunación, que comenzó su acción deletérea profunda desde
principios del siglo con la vacuna antivariólica, hasta alcanzar su auge en
los últimos cien años con la aparición en profusión de sueros y vacunas de
toda índole, que consiguieron sycotizar profundamente a la humanidad. Por ese
motivo, la indicación de Thuya surge a menudo de la noción de la existencia en
el paciente de trastornos por vacunaciones o a partir de ellas, cuando nunca
quedó bien desde una vacunación, o en los muy vacunados o aún en los que no
prendió la vacuna, casos todos a los que Burnett denominó de Vaccinosis por estar afectados de vaccínia, "ese profundo y, a menudo, prolongado estado
constitucional mórbido engendrado por el virus vaccinal" (Burnett); y también
en los trastornos a punto de partida en una blenorragia suprimida
(especialmente reumatismo y problemas genitales).
*** 14 La manifestación mórbida visible característica de la sycosis
consiste en una hiperproducción tisural que aparece en la piel y algunas
mucosas bajo la forma de verrugas, condilomas, excrescencias y pólipos (ver
Particulares), y, eventualmente, de tumores, cáncer, lupus o fungus hamatodes,
y lipomas (Burnett: para él, Thuya era "el medicamento"). Estados
precancerosos.
** 15 Sus modalidades más destacadas son: agravación (o aparición de
síntomas) después de mediodía y de medianoche, especialmente a las 15 horas y
a las 3 de la madrugada; por el frío, el aire frío, por enfriarse, por el frío
húmedo, por la humedad; por el calor de la cama y de la habitación; por
ciertos alimentos, como el café, las grasas, la cebolla, el té, los dulces o
aún el olor de las comidas; acostado sobre el lado izquierdo, por destapar una
parte del cuerpo; por el tacto; por cerrar los ojos; por el movimiento;
caminando; dejando caer los brazos; por el agua fría; por cambios de tiempo;
por los rayos del sol; por la luz brillante; después del desayuno o de comer;
por el coito; en luna creciente; por el vino; mientras orina; estirando el
miembro afectado. Mejor: acostado de espaldas; al aire libre; flexionando las
miembros; por la presión; por la frotación o el masaje.
PARTICULARES
** 21 Vértigo al levantarse de una silla o acostado, o al cerrar los ojos
(desaparece apenas los abre), o al agacharse, o mirando hacia arriba o a los
costados; con la sensación de flotar en el aire. Cefalea como si le clavaran
un clavo a pequeños golpes (peor caminando al aire libre), sobre todo en la
frente, en la eminencia frontal izquierda, en el parietal (despues del
almuerzo, mejor por la presión) y en el vértex (de 3 a 4 de la madrugada;
mejor caminando al aire libre y después de sudar). Cefaleas por excesos
sexuales, por acalorarse, por esfuerzos, al agacharse, por el té, por mirar hacia arriba; mejor envolviéndose la cabeza o llevando la cabeza hacia atrás;
lo saca de la cama de noche. Cefalea frontal izquierda extendida al occipucio;
con la sensación de que le presionaran un botón convexo en esa zona.
Insolación. El cabello se pone seco, duro, sin brillo, y cae; o crece
lentamente, o se parte, o se pone muy delgado; o grasoso y lleno de y polvillo
o escamitas. Venas hinchadas en las sienes. Caspa blanca. Sudores con olor
dulzón, a miel, en la cabeza, en las partes cubiertas; las partes
elescubiertas o donde apoya la cabeza están secas. Pitiriasis. Eczema.
** 22 Dolores desgarrantes en las cejas. Sensación de arena o ardor en los
ojos. Queratitís, con hipopion; úlceras de córnea; manchas marrones en la
córnea. Iritis sifilítica. Esclerocoroiditis. Estafiloma. Oftalmia del recién
nacido. Conjuntivitis flictenular. Miosis o midriasís. Párpados inflamados y
duros; con granulaciones como verrugas o ampollas; secos, con escamitas y
erupciones o eczema. Condilomas y nódulos en los párpados; nódulos rojos y
dolorosos. Orzuelos, chalazión y tumores tarsales, después que Staphisagria
mejora parcialmente, sin curar; nódulos duros y gruesos. Epitelioma en el
párpado inferior izquierdo. Siente los párpados hinchados, corno si hubiera un
cuerpo extraño. Siente los párpados muy pesados; ptosis. Lagrimeo al aire
libre y al viento. Sensación de frío en el ojo, que duele al destaparlo, debe
abrigarlo; si se destapa los ojos, siente como si saliera una corriente da
aire frío de la cabeza y soplara a través de ellos. Se le pegan los párpados
de noche. Visión turbia, peor al leer. Diplopía. Miopía. Moscas volantes. Ve
discos luminosos, llamaradas, luces que caen (en la oscuridad) o gotas negras
que caen (en la luz o de día); o rayas flotantes, o verdes (que la asustan).
** 23 Otitis crónicas, con secreción sobre todo a la derecha, con olor a
carne podrida. Otalgias como puntadas o desgarrantes, con micciones profusas y
repetidas. Sensación de hinchazón dentro del oído, con hipoacusia. Ruidos en
los oídos como de agua hirviendo o rugidos, o crujidos al tragar saliva.
Pólipo blando en el oído, rojo pálido, que sangre fácilmente al tocarlo.
** 24 Nariz roja y caliente; erupciones rojas. Varicosidades en las aletas
nasales. Aletas nwales duras, más la izquierda. Grieta en la aleta nasal
derecha. Pliegues nasogenianos muy marcados y grasosos. Epistaxis frecuentes,
después de acalorarse o al sonarse. Coriza seco, fluyente al aire libre.
Sequedad dentro de la nariz, mejor al aire libre. Secreción nasal espesa,
verdosa, fétida, con pus y sangre; catarro crónico después de un sarampión,
escarlatina o viruela, que baja de los senos frontales; con presión dolorosa
en la raíz de la nariz. Acumulación de mucosidades en las coanas. Costras en
la mucosa nasal, especialmente en el tabique, marrones y secas, difíciles de
sacar, dejando lastimado y dolorido al arrancarlas. Ozena. Ulceraciones dentro
de la nariz, redondas en el tabique, o arriba a la derecha, recubiertas por
costras. Verrugas en la nariz. Siente olor a salmuera de pescado o a cerveza
fermentada.
** 25 Calor y enrojecimiento de toda la cara, con red marcada de venas
finas; o rubor circunscripto a las mejillas y ardiente. Cara edematizada o
abotagado. Erisipela. Pecas o manchas marrones en la cara. Cara brillante, aceitosa, como grasosa. Neuralgia facial más del lado izquierdo, peor a las 3
de la madrugada; por supresión de blenorragia o de erupción en el oído y en
los bebedores de té; se extiende a cuello y cabeza. Verrugas en la cara, labio
superior y mentón. Sudores en la cara, especialmente del lado sobre el que no
está acostado. Sacudidas en los labios. Tumorcito como una arveja en el
espesor del labio superior. Labios pálidos, hinchados y descamados; o
azulados. Ulceras en las comisuras labiales. Crujidos en la articulación de
la mandíbula al masticar o al abrir mucho la boca. Hinchazón de las glándulas
submaxilares con una línea transversal blanca bajo el inferior, como si
acabara de beber leche.
** 26 Odontalgias peor por beber té o al masticar o por agua fría. Caries de
cuello, solo en las raíces o en los lados del diente, nunca en la corona.
Dolor en un diente cariado al sonarse. Puntadas en los dientes, extendidas a
los oídos. Los dientes se fragmentan o desmenuzan; se ponen de color negro o
amarillo sucio.
*** 30 Sensación de tener algo vivo en el vientre, especialmente en la fosa
ilíaca derecha. Tiene movimientos en el vientre, como si sintiera los puños
de un feto, que hacen sobresalir las paredes del abdomen, sin dolor. Presión
dolorosa en el hígado, con hinchazón. Vientre distendido, con flatulencia y
borborigmos, como si un animal estuviera llorando en el vientre. Vientre
índurado. Retracción de la parte superior del vientre. Ombligo lastimado o
dolorido. Puntadas en los hipocondrios. Dolores tironeantes en las ingles
estando parado o caminando, con dolor extendido a los muslos al sentarse.
Adenopatía dolorosa en las ingles. Invaginación intestinal. Manchas marrones o
amarillas en el vientre. Zona abdominal.
** 31 Constipación obstinada con deseos ineficaces de defecar y dificultad
para evacuar las heces duras y de gran tamaño y oscuras, a veces cubiertas de
sangre; inactividad rectal. Las heces retroceden después de haber sido
parcialmente expulsadas. Diarrea temprano a la mañana o después del desayuno o
después de comer, o por excitación, por café o por cebolla o después de una
vacunación; las heces son amarillentas, acuosas, saliendo bruscamente en
chorro, con un gorgoteo, con muchos gases, y como si salieran de un barril;
agotadoras; con o sin cólicos; a veces periódicas después del desayuno y
siempre a la misma hora; pueden ser ceitosas o grasosas. Flatos explosivos al
mover el vientre o difíciles de expulsar por constricción anal (en ocasiones
dolorosa al defecar). Ano físurado, doloroso y rodeado de condilomas planos y
dolorosos. Humedad anal acre, que aumenta con el rascado y le produce
excoriaciones. Sudores fétidos en el ano y periné, peor por la mañana. Fístula
anal. Hemorroides hinchadas, con prurito y ardor; duelen al tocarlas y, sobre
todo, estando sentado.
*** 32 Deseos urgentes y frecuentes de orinar; debe apurarse, porque, si no,
se orina; sobre todo durante la sudoración. Nefritis. Puntadas desde el recto
a la vejiga. La micción demora en comenzar y es incompleta; debe orinar cinco
o seis veces seguidas hasta vaciar la vejiga, que parece paralizada, como si
no tuviera fuerzas para evacuar la orina; tenesmo. Incontinencia de orina, de
noche, al toser, o en gotas después de haber orinado. El chorro de orina sale
doble, o muy fino o interrumpido. Siente gotear orina quemante a lo largo de
la uretra o tiene la sensación de que quedara algo de orina en la uretra o en
la fosa navicular después de orinar. Dolor quemante o cortante en la uretra
mientras orina o al terminar de orinar (orina quemante). Sale sangre de la
uretra después de orinar. Hipertrofia de próstata. Orina amarillenta o de
color vino; sanguinolenta; acuosa; copiosa y con glucosa (diabetes); con
espuma muy persistente. Prurito en la uretra; hormigueo voluptuoso en la fosa
navicular. Secreción uretral blenorragíca aguda o crónica; amarillenta,
verdosa o amarillo verdosa, copiosa, purulenta o acuosa; con el meato uretral
pegado a la mañana e hinchazón uretral y del meato.
*** 33 Sudores en los genitales masculinos, especialmente en el escroto, con
olor dulzón, como a miel, que tiñen la ropa de amarillo. Dolor en los cordones
espermáticos por supresión de una blenorragia. Condilomas en el pene, glande,
prepucio o escroto, que sangran fácilmente, arden, duelen, rezuman humedad, o pican y supuran, peor en el cuarto creciente lunar. Excoriaciones en el glande
y en el escroto, y entre el escroto y los muslos. Ulceras en el pene, glande y
prepucio; chancros en el pene. Excrescencia roja detrás del glande; o como
coliflor, oliendo a queso rancio o salmuera. Tironeo en los testículos, con
retracción del izquierdo. Dolor quemante en el glande y punzante en el
escroto. Erecciones dolorosas y continuas, peor de noche y a la mañana, con
dolores lancinantes en la uretra. Irresistible tendencia a la masturbación.
Poluciones nocturnas que lo despiertan. Semen de olor fétido. Salida de
líquido prostático. Induración crónica de los testículos o de la próstata.
Sacudidas en el pene.
** 34 Condilomas, verrugas o excrescencías en coliflor en la vulva y vagina.
Ulceraciones vulvares; prurito y ardor. Fístula recto vaginal. Vagina muy
sensible, con dolores durante el coito, que le impiden llevarlo a cabo.
Hinchazón y excoriación en los labios vulvares. Pólipos uterinos. Prolapso de
útero. Inflamación del ovario izquierdo, con dolores violentos, ardientes o
cortantes, peor durante la menstruación, después del coito, cuando camina o
viaja, y con urgencia para orinar; necesita sentarse o acostarse; el dolor se
extiende a la ingle izquierda y, a veces, a la pierna izquierda.
Menstruaciones muy adelantadas, abundantes, prolongadas y fétidas, de sangre
negra y viscosa; o cortas y escasas. Flujo mucoso, abundante, espeso, verdoso,
irritante. Tendencia al aborto al terminar el tercer mes del embarazo, con
dolores de tironeo hacia abajo en el útero y sangre roja y con coágulos.
Durante el embarazo, el feto se mueve tan violentamente, que despierta a la
madre. Dolores de parto débiles o en cesación; dolores en la articulación
sacroilíaca, que van a la ingle izquierda, peor caminando, insoportables, debe
acostarse. Hinchazón del seno izquierdo, algo dolorosa, durante las
menstruaciones retrasadas, con un nódulo duro que desaparece después. Cáncer
de útero.
*** 38 Crujidos en las articulaciones al estirarlas. Los miembros se
duermen. Reumatismo post blenorrágico o artritis deformante, con sensación de
adormecimiento; los dolores están peor por el calor, mejor por el movimiento,
por el frío y después de sudar. Las uñas crecen rápidamente, pero son blandas,
quebradizas, deformadas, acanaladas y se doblan fácilmente. Uña encarnada.
Supurción en las uñas después de una vacunción. Padrastros. Sudores copiosos
en las áxilas. Latidos y pinchazos en los hombros. Atrofia del brazo derecho
después de una revacunación. Dolor en todo el miembro superior; o como si
fuera en el periostio o en el hueso. Temblor en las manos cuando escribe.
Quiste en la muñeca. Coloración veteada o marmolada en las extremidades;
coloración marrón en el dorso de las manos y cara interna de los muslos. Manos
secas; con las venas hinchadas. Verrugas en las manos, sobre todo en el dorso;
córneas y dolorosas. Dedos fríos, pálidos y torpes. En la punta de los dedos:
cosquilleo, hinchazón dolorosa y roja, o inflamación, o frío. Los dolores en
los miembros superiores están peor cuando cuelgan o están expuestos al calor y
mejor por el movimiento, por el frío y después de sudar. Panadizos. Calor en
los muslos con manos y pies fríos. Sudores en las manos; en los muslos, sobre
todo en la cara interna; en los pies, con bromhidrosis. Trastornos que
sobrevienen por supresión de los sudores de los pies. Sensación como si los
miembros estuvieran frágiles y fueran a quebrarse. Siente las piernas (o los
miembros inferiores) rígídos y pesados cuando camina, como si fueran de
madera. Ciática izquierda, con la pierna atrofiada. Hemíplejia. Paresia y
atrofia de la pierna derecha, con frío. Gran debilidad y aflojamiento en las
piernas, especialmente al subir escaleras. Ulceras en los muslos; prurito.
Reumatismo blenrrágco en rodillas, pies y tobillos; no puede caminar. Dolores
en la cara anterior de la tibia. Dolor en el talón como si estuviera dormido;
puntadas desde el talón al tendón de Aquiles. Nódulos blancos y prurito
violento en los dedos del pie; hinchazón roja y dolor en la punta. Pie
izquierdo dormido. Induraciones córneas; callos. Red venosa como marmolada,
en la planta de los pies. Sabañones en los dedos de los pies. Sacudidas en los
miembros superiores. Agravación general por destapar los miembros o parte de
ellos. Várices en los miembros inferiores; en los pies.
** 39 Somnolencia y debilidad después de comer. Insomnio después de
medlianoche o de las 3 de la madrugada. Sueña: que cae desde lugares altos;
con muertos y cadáveres, especialmente cuando está acostado sobre el lado
izquierdo; con desgracias; sueños eróticos sin poluciones y con erección
dolorosa al despertar. El sueño no lo descansa.
** 40 Escalofríos que comienzan en los muslos; con estremecimientos y calor
en la cara; pueden aparecer en un solo lado del cuerpo, especialmente en el
izquierdo, con frío al tacto; peor a las 3, a las 15 y a las 17 horas. Chuchos
seguidos de sudores, sin fiebre íntermedia. Fiebre después de las 3 de la
madrugada; en las partes cubiertas del cuerpo. Sudores copiosos, más de noche,
especialmente o únicamente en las partes descubiertas del cuerpo, excepto en
la cabeza; o generalizados, en todo el cuerpo, excepto la cabeza; o de un solo
lado del cuerpo, sobre todo aquel sobre el que no está acostado; suda al
comenzar a dormir o mientras duerme, deja de sudar al despertarse. Los sudores
son aceitosos, de un peculiar olor dulzón como a miel o a sopa de puerros, o
agrio o fétido, y se agravan o aparecen por toser, por alimentos calientes o
antes de la menstruación, y mejoran o desaparecen al destaparse o caminando;
tiñen la ropa de amarillo.
*** 41 La piel tiene un aspecto sucio, grasoso, viscoso, con manchas
amarronadas o amarillentas en diversos sitios, diseminadas. Condilomos de
rápido crecimiento, sangrantes, húmedos, en abanico, que supuran y arden.
Excrescencias carnosas, suaves, húmedas, anchas, pediculadas; córneas;
fétidas; en coliflor. Verrugas (Thuya es, tal vez, el primer medicamento en
que se piensa ante un paciente con verrugas, y es muy probable que deba
prescribírselo, ya al comienzo del tratamiento o en algún otro momento):
desflecadas o dentadas, grandes o pequeñas, húmedas, sangrantes, pediculadas o
tubulares o chatas; marrones o rojas; con olor a queso rancio o a salmuera, y
a veces con dolores punzantes; o negras; blandas o córneas; supuradas.
Angiomas. Viruela; varicela. Erupciones que solo aparecen en las partes
cubiertas y que arden violentamente después del rascado. Psoriasis
generalizada. Lepra. Sicosis de la barba. Herpes zoster. Callos ardientes.
Ulceras de bordes dentados y dolorosos, rodeadas de vesículas. Ulceras
cancerosas o sifilíticas. Epiteliomas. Puntos rubí.
COMPLEMENTARIOS:
Medorrhinum. Sabina. Silicea. Arsenicum Album. Natrum Sulphuricum.