PARTICULARES
** 8 Dolor en los ojos como sí estuvieran dilatados y empujados fuera de las
órbitas, como si fueran muy grandes para ellas. Dolor en los ojos al
anochecer, peor por la luz y al agachiarse o al leer. Debilidad de, la vista,
peor por abusar de sus ojos,, no puede leer ni escribir mucho tiempo, porque
aparecen ardores en los ojos, se le confunden las letras, ve como aleteos y
turbio; debe enjugarse a menudo los ojos. Párpados hinchados. Vesículas en los bordes de los párpados. Orzuelos. Ojos secos. Lagrimeo al aire libre o cuando
mira fijo a un objeto. Secreción dura y seca en párpados y pestañas de mañana.
Contracción espasmódica del párpado inferior. Mirada fija. Parálisis de los
músculos del ojo. Opacidades de la córnea y del humor vítreo. Visión doble que
mejora al echar la cabeza hacia atrás. Fotofobia. Todos los objetos aparecen
como en la sombra. Visión oscurecida con manchas brillantes, peor al frotarse
los ojos. Promueve la reabsorción de fragmentos del cristalino después de la
operación de cataratas.
*** 21 Las vias respiratorias constituyen el principal campo de acción de
Senega. Laringitis agudas con sensación de excoriación, ardor y sequedad (peor
de mañana) de la laringe, con coriza y tos seca constante que le "desgarra o
lastima" la garganta, especialmente al acostarse, con peligro de sofocación
por constricción laríngea. Laringitis subaguda o crónica, especialmente en
ancianos, con sequedad y ardor excoriante, paresia de las cuerdas vocales y
ronquera después de haber hablado o por leer en voz alta (repentina) o por
tomar frío. Abundante acumulación de mucosidades en tráquea y laringe; con
pinchazos y disnea. Tos seca, continua, violenta, brutal, por cosquilleo o
irritación laríngea, peor por el aire frío y de mañana, que sacude al paciente
desde la cabeza a los pies, con gusto a cobre en la boca, y con una gran
acumulación de mucosidades en los bronquios, con respiración ruidosa y
oprimida, y rales húmedos y sibilancias numerosos y generalizados; hay una
verdadera paresía bronquial, con expectoración difícil, nula o escasa (que, de
todas maneras, no lo alivia) de mucosídados muy adherentes y filamentosas,
transparentes como clara de huevo o grises; a menudo en ancianos. La tos está
peor al aire libre, caminando rápido, al anochecer y de noche, en reposo,
acostado sobre el lado izquierdo, en una habitación calurosa o sentado, y
habitualmente termina en un estornudo; provoca dolor en los ojos, en la
garganta, e incontinencia de orina. Disnea cuándo camina rápido o sube
escaleras. Opresión considerable, especialmente al aire libre y al agacharse,
como si bruscamente el tórax fuera muy estrecho. Presión en el pecho, peor en
reposo, o a la mañana, o de noche al despertar. Tórax dolorido en sus paredes,
especialmente al mover los brazos (más el izquierdo); dolores excoriantes,
peor por la presión, el movimíento, la tos y los estornudos. Dolores punzantes
y ardientes en el hemitórax izquierdo, peor acostado sobre el derecho.
Dolorimiento ardiente retroesternal, peor al moverse o respirar profundamente.
Dolores íntercostales y en los músculos intercostales, vivos, agudos, peor en
la inspiración, por la presión, en reposo y acostado sobre el lado derecho,
mejor por el movimiento. Oleadas de calor, o congestión en el tórax. Presión
en el tórax, con la sensación de que los pulmones son empujados hacia atrás,
contra la columna. Vicios asmáticos con ataques congestivos. Coqueluche.
Hidrotórax. Pleuresia con derrame, más a la derecha, con la tos
caracteristica, disnea, opresión y dolores en la base del tórax. La mayoría de
los síntomas respiratorios está peor en reposo.
COMPLEMENTARIO:
Caustícum.